Al igual que el ying y el yang o que la sal y el aceite. Hacer CrossFit y Pilates es la suma perfecta para estar en forma y cambiar tu cuerpo y mente de manera instantánea y divertida. Son muchas las causas por las que las dos disciplinas deberían combinarse e ir de la mano empero, la primera y más evidente: por los prejuicios.
Como apasionados de ambos procedimientos hemos tenido que oír comentarios consecutivos tanto del CrossFit como del Pilates basados en los prejuicios y el desconocimiento total, la ignorancia y la estupidez humana resultan muy atrevidas. Para bastantes el CrossFit es poco más que hacer puenting, un deporte lesivo para ‘super-héroes’ en el cual te rompes y te conviertes en una piedra. Para los demás varios, el Pilates es estar tumbado y pensar.
Las pruebas desmienten los dos prejuicios: es infinitamente más lesivo jugar a fútbol que entrenar CrossFit, las estadísticas no mienten. Y necesita muchísimo más esfuerzo una hora de Pilates que una hora de ‘running’ y NO es una crítica, es de esta forma.
Otra de las cosas que ambos deportes poseen en común es que se complementan por completo debido a que los dos nacen de la gimnasia y sus fundadores (Joseph Pilates y Greg Glasssman) eran perfectos conocedores de ella y de las ventajas que aportan al cuerpo humano. En ambos casos se fundamenta en movimientos naturales y corporales que en el día a día realizamos, por lo cual, ambos se asientan en movimientos funcionales y en la función de mantener el control del propio cuerpo humano.
En ambos casos desafías tu propia resistencia y trabajas todos los equipos musculares por completo. Además, ambas disciplinas son seguras y ayudan a robustecer músculos, huesos y tendones. Tanto el CrossFit como el Pilates tienen la posibilidad de hacer si estás lesionado adaptándose a tus necesidades con buenos instructores. Insistimos: como conocedores de ambos procedimientos, es impresionante la de movimientos similares que se cruzan en ambos deportes.
Si el propósito que tienes entre manos es cambiar tu cuerpo humano, no lo dudes, prueba a combinar estas 2 disciplinas. El Pilates te enseñará a respirar -esencial para el control de tu capacidad cardiovascular en un WOD duro- y te dará la fuerza y control elemental del core -si se te resisten los toes to bar, por ejemplo- así como una ayuda extra para recobrar el tono y la relajación de los músculos.
Y el CrossFit te aportará la fuerza, resistencia, velocidad y confort que necesitas para poder hacer aquella postura tan complicada y, más que nada, a aguantarla.
Este matrimonio perfecto puede hacerte modificar la manera de ver el planeta. Ahora es el instante.
Frente a cualquier duda o sugerencia, ya sabes, ponte en contacto con CrossFit Costa Blanca.